miércoles, 1 de julio de 2009

Nunca me gusto Julio.
Ni este, ni el anterior, ni el primero, ni el que lo sucedio.

Nunca me gustó el invierno con su frio ni tampoco el otoño, 

con sus hojas insulsas generando sonidos inarmónicos al ser pisadas
ni la gente acurrucándose en la estación del tren
ni las manos esclavas en los bolsillos
ni los cigarrillos temblorosos.

No me gustan las canciones congeladas
ni las toses ni las bufandas.
Nunca me gusto el invierno con sus tapados
ni la nariz fria ni los ojos llorosos.

Nunca me gusto Julio, ni este ni el anterior, ni el primero ni el que lo sucedió.

1 comentarios:

Yugoslavija dijo...

difiero de vos en cuanto a varias cosas; el frío es mega lindo para meterse en la cama y tomar cappuchinos y las hojas del otoño son re pintorescas, mientras más amarillas mejor.

a mí me gusta julio, aunque me da un poco de flojera tener vacaciones y pasar un mes sin ir a clase.

malvados cerdos